Así son de pequeños…
Desde que nacen no dejarán
de sorprenderte si quiera un día de su existencia. Sus primeros añitos de vida
están llenos de descubrimientos. Cada hora que pases con ellos resulta de vital
importancia para adaptarse poco a poco a este nuevo mundo que apenas conocen.
Pero según suelen ser sus descubrimientos son de intensas
sus más sanas e insospechadas ocurrencias. Basta permanecer con la cámara
fotográfica o bien la del teléfono celular al asecho como cazador que espera
paciente el descuido de su presa.
Porque así… como presas, pudieran llegar a sentirse
cuando se les mira desde detrás del lente.
Qué no eres fotógrafo… tampoco importa. Incluso…
adaptarlos a verse enfocados constantemente les prepara para evitarles
posteriormente el sufrimiento cuando deseamos perfeccionar la calidad de imagen
desde perspectivas y ángulos fotográficos evaluados profesionalmente.
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